Enero es el mes de concienciación de cáncer cervical, uno de los más comunes entre las mujeres puertorriqueñas. Sin embargo, se trata de un tipo cáncer que se puede prevenir.

El Registro Central de Cáncer de Puerto Rico, desarrolló un documento informativo con datos actuales sobre la incidencia y mortalidad del cáncer cervical. A continuación, resumimos algunos puntos importantes de este documento. Vea también la infografía desarrollada por los estudiantes de MS de Epidemiología del Recinto de Ciencias Médicas dela Universidad de Puerto Rico, junto a personal del Registro Central de Cáncer.

¿Qué es el cáncer cervical?

Cuando el cáncer comienza en el cuello del útero se le conoce como cáncer de cérvix. El cérvix es la parte que conecta la vagina con la parte inferior del útero. Las infecciones prolongadas con ciertos tipos del virus de papiloma humano (VPH) causan casi todos los tipos de cáncer de cuello uterino. El cáncer cervical se puede curar si se detecta en las primeras etapas de su evolución. Este tipo de cáncer se puede prevenir con pruebas de detección temprana y con la vacuna de VPH.

Síntomas

Usualmente en etapas tempranas no se presentan síntomas. En etapas más avanzadas, se pueden presentar algunos signos como:

• Sangrado vaginal inusual
• Flujo vaginal inusual
• Dolor pélvico
• Dolor o sangrado luego de las relaciones sexuales

Estos síntomas pueden presentarse por otras condiciones. Consulte a su médico de observar alguno.

Factores de riesgo

El principal factor de riesgo atribuido al cáncer cervical es la infección con el VPH. Este virus es transmitido de una persona a otra por contacto de piel durante las relaciones sexuales. Algunos tipos de este virus provocan cambios en las células del cérvix que las convierten en células malignas.

Otros factores que se asocian al desarrollo de cáncer cervical pueden ser:

• Consumo de tabaco
• Tener VIH u otra enfermedad que comprometa al sistema inmunológico
• Uso de pastillas anticonceptivas por más de cinco años consecutivos
• Tener múltiples parejas sexuales

Prevalencia del cáncer de cérvix?

El cáncer cervical ocupó la séptima posición de diagnósticos de todos los tipos de cáncer en mujeres en el periodo 2009-2013. Representó el 3.6% de todos los casos nuevos de cáncer en mujeres y 2.4% de todas las muertes por cáncer.

Se le conoce como prevalencia a la cantidad de personas que viven con una enfermedad y fueron diagnosticados en o antes de cierto periodo. Esta información es útil para planificar programas de salud. La prevalencia de cáncer cervical en Puerto Rico, en el periodo 1987-2013 fue 1,406 casos. Esto significa que en este periodo había 1,406 mujeres viviendo con un diagnóstico de cáncer cervical. La detección temprana del cáncer cervical está asociada con una alta supervivencia y una mejor calidad de vida.

Basado en los datos del periodo 2009- 2013, el 1.1% de las mujeres que nazcan hoy en Puerto Rico podrían ser diagnosticadas con cáncer de cérvix durante su vida. Aproximadamente 1 de cada 91 mujeres en Puerto Rico podrían desarrollar cáncer de cérvix.
Entre 1987 y 2013, las tasas de incidencia de cáncer cervical en Puerto Rico disminuyeron un promedio de 0.4% por año. Mientras que las tasas de mortalidad disminuyeron 1.4% por año durante el mismo periodo. La mayor proporción de casos nuevos de cáncer cervical se diagnosticó en mujeres de 30 a 39 años de edad (22.3%) y en mujeres de 40 a 49 años de edad (23.8%). La mediana de edad en el momento del diagnóstico fue de 48 años.

La mayor proporción de muertes por cáncer cervical ocurrió en mujeres de 60 a 69 años de edad (18.1%). La mediana de edad en el momento de la muerte fue de 58 años.

Pruebas de detección

El cáncer cervical es el cáncer ginecológico más fácil de prevenir gracias a las pruebas de detección y el seguimiento. Hay dos pruebas que ayudan a la detección temprana del cáncer cervical:

La prueba de Pap consiste en la recolección de celúlas del cuello uterino y vagina usando un algodón, un cepillo o una paleta de madera; estas células se examinan bajo un microscopio. Con esta prueba se identifican posibles células precancerosas del cérvix que pueden provocar cáncer cervical de no tratarse a tiempo. El “United States Preventive Task Force” (USPTF) recomienda que toda mujer de 21 a 65 años de edad se realice la prueba cada tres años.

Esta prueba de laboratorio analiza el ADN o ARN de las células del cuello uterino para deterinar si hay infección con VPH. Se puede usar la misma muestra tomada en el Pap para hacer esta prueba. El USPTF recomienda que toda mujer de 30 a 65 años de edad se realice la prueba una vez cada cinco años.

Esta vacuna es muy importante porque protege en contra de varios tipos de cáncer provocados por infección con VPH[5]. Esta vacuna es recomendada en niños y niñas desde los 11 años[5]. Las mujeres jóvenes que no hayan sido vacunadas pueden hacerlo hasta los 26 años[5].

Otros factores de riesgo para el desarrollo de cáncer cervical que también se pueden minimizar o eliminar son:

• Fumar
• Disminuir el número de parejas sexuales